Barrio del Albaicín

                                                BARRIO   DEL ALBAICÍN    

IMG_1565
Barrio del Albaicín desde San Miguel Alto. Granada. Foto: Francisco López

Espero que mi buen amigo Rafael no tenga inconveniente que publique, antes de dar una explicación del barrio, lo que me ha mandado por el correo electrónico. Creo que es pura poesía, aunque esté escrito en prosa. Es prosa poética:

«Si te pienso…sueño, sueño que me quita el sueño, ¡Albayzín!

Con raíces en la Prehistoria, gestas únicas forjaron tu carácter indómito y belicoso.

Se levanta Helios y, cada mañana, se pasea por las umbrosas galerías de tus calles.

Al alba, el gallo… a lo lejos señala la madrugada, en medio del silencio embrujado de callejuelas desiertas y placetas vacías.

Si te pienso…sueño, sueño que me quita el sueño, ¡Albayzín!

El Sol, entretanto, busca refugio en la penumbra de tus patios y en la frescura de tus cármenes.

La luz cegadora, casi, se cuela por rendijas… de ventanas desajustadas y visillos entreabiertos.

Barrio de las alturas que, ensimismado por tanto resplandor, para ausentar a la noche… se viste de cal y se adorna de farolas

Si te pienso…sueño, sueño que me quita el sueño, ¡Albayzín!

Ruido de lebrillos de fajalauza y de zafas de blanco vidriado ofrecen un poco de agua fresca, para despabilar a chicos y grandes
La llamada de la calle se hace irresistible a los pequeños… ante voces persistentes y reconocibles.

Fogones de carbón azabache acarician, entre sus cálidos brazos, recipientes doloridos por los años, dejando escapar un olor familiar a café de cebada.

Si te pienso…sueño, sueño que me quita el sueño, ¡Albayzín!

Sobre aquel mar de tejados, rizados tirabuzones ascendían, deshilachándose, por un cielo incontaminado.

Ajetreo diario, deprisa siempre, siempre con algo por hacer. Faenas de la casa… realizadas por hábiles manos femeninas, agrietadas y zalameras.

Cuatro esquinas y tres estrellas y una sola calle del Agua… hasta llegar a Plaza Larga, bullanguera y festiva».

 

 Lo que pretendo con esta presentación del barrio del Albaicín no es hacer un estudio exhaustivo del mismo desde el punto de vista geográfico, histórico, artístico, etc. sino darle, a todas las personas que nos visitan, unos elementos y unas referencias básicas para que sepan dónde se encuentran y, de esta manera, despertar en ellas una inquietud que, unida a la curiosidad innata de toda persona, les lleve a descubrir un barrio que es algo más que un barrio: es un lugar Patrimonio de la Humanidad.

UBICACIÓN

El barrio del Albaicín se encuentra ubicado al pie del cerro de San Miguel, en la colina que se alza en la margen derecha del río Darro, enfrente de la Alhambra.

Esta ubicación condicionará mucho su estructura y el trazado de sus calles, pero sin perder de vista el concepto que de barrio y de calle se tenía en el mundo musulmán. Más adelante hablaremos de ello.

¿DE DÓNDE PROCEDE EL NOMBRE ALBAICÍN?

Los historiadores y los investigadores no se ponen de acuerdo en la procedencia del nombre y dan tres versiones distintas:

a) Para unos historiadores, el nombre procede de los habitantes de la ciudad de Baeza que, tras la batalla de las Navas de Tolosa en 1212, y, sobre todo, tras la conquista de la ciudad por Fernando III el Santo en 1227, abandonan Baeza para trasladarse a la ciudad de Granada y se instalan en la parte alta del Albaicín, fuera de las muralla de la Alcazaba Qadima. Estos pobladores eran los Al-Baezzin o Al-Bayyazin. De ahí el nombre

b) Para otros historiadores, entre ellos Luis Seco de Lucena, el nombre proviene del término árabe Rabad al-bayyasin, que se podría traducir como «Barrio de los Halconeros» por la importancia que tenía, entre ellos,  la cetrería.

c) Otros afirman que el nombre procede de un término árabe que significa «barrio en cuesta» o «barrio en pendiente», como se atestigua en los Papeles del Darro

Cualquiera que sea la explicación, lo que a nosotros nos interesa es el nombre: Albaicín

¿QUÉ ENTENDEMOS CUANDO NOSOTROS DECIMOS: ALBAICÍN?

Cuando nosotros hacemos referencia al Albaicín nos estamos refiriendo a una barrio de Granada cuyos límites son: La Acera de San Ildefonso, la Puerta y calle Elvira, Plaza Nueva, Carrera del Darro, Paseo del Padre Manjón (Paseo de los Tristes), Cuesta del Chapiz, Calle de San Luis y Camino de San Antonio.

Hasta que se generalizó el nombre de Albaicín, en el siglo XV, para todo el espacio que hemos delimitado con anterioridad, existían distintos barrios en la colina, ya que, según Torres Balbás, los barrios de las ciudades hispanomusulmanas eran de muy desigual extensión y, con frecuencia, reducidísimos: algunos comprendían una sola calle

a) La Alcazaba Qadima. Recinto amurallado ( se fue ampliando con el paso del tiempo: la Alcazaba Gidida)) y que englobaba lo que, actualmente, es el núcleo central del barrio:  La Plaza de San Nicolás, la Plaza de San Miguel Bajo, las Tomasas, hasta San Juan de los Reyes.

b) El Albaicín. Arrabal , fuera del recinto amurallado, situado en la parte oeste del Cerro de San Miguel y en la cara sur del Cerro de San Cristóbal. Es decir, al norte de la Alcazaba Qadima. Algunos autores desgajan del Albaicín el núcleo de Al – Bayda

c) El Zenete. Arrabal ubicado en la ladera oeste del actual barrio, dominando la parte baja de la ciudad y la vega de Granada. Su límite es la calle Elvira. Zenete significa «en ladera»

d) Los Axares. Arrabal comprendido entre San Juan de los Reyes y el río Darro. En este barrio se asentaron la nobleza (también en el Realejo) y las clases pudientes tras la conquista de la ciudad de Granada, de ahí la cantidad de palacios que hay en el mismo.

Este conglomerado formado por la Alcazaba Qadima, el Albaicín, el Zenete y los Axares, es el actual barrio del Albaicín

planos del Albaicín 003
Plano del Albaicín Musulmán. Francisco López

EL ENTRAMADO URBANO DEL ALBAICÍN

Para entender el entramado urbano que define al Albaicín, vamos a acudir a D. Leopoldo Torrés Balbás, insigne arquitecto y restaurador, que estuvo trabajando en la restauración de la Alhambra y el Generalife.

En su libro «Las ciudades hispano-musulmanas» nos hace una descripción que podemos aplicar perfectamente al Albaicín y que refleja, de manera exacta, lo que era antes de las transformaciones que se produjeron tras la conquista de la ciudad y la cristianización del barrio.

En toda ciudad hispano-musulmana existía un núcleo central amurallado (La madina o medina) y una serie de arrabales relativamente autónomos y casi siempre protegidos por una cerca (la del Albaicín era la cerca de Don Gonzalo) independiente de las murallas de la Medina.

Los arrabales se componían de barrios de muy desigual extensión, algunos tan pequeños que  constaban de una sola calle. Estos barrios tenían puertas en sus extremos que se cerraban de noche (esto hacía posible que en tiempo de revueltas pudieran resistir tiempo en los barrios. Un ejemplo lo tenemos en el enfrentamiento de Boabdil con su tío El Zagal por el trono de Granada)

Las gentes se agrupaban en los barrios por su origen (al Baezzin), por su actividad comercial (Al-Fajjarin: los Alfareros), por su situación topográfica (Alhacaba: la Cuesta), etc. 

La separación y el aislamiento de los arrabales, los barrios y las calles; la angostura y tortuosidad de estas últimas; los pasadizos y los muros y puertas de cerramiento, respondían a una necesidad primordial de defensa.  En períodos frecuentes de inseguridad y revueltas, si la cerca exterior protegía del enemigo, todos esos otros obstáculos eran necesarios para defenderse del interior, más peligroso por más cercano. Los vecinos para disfrutar de una relativa tranquilidad necesitaban vivir apretados unos con otros.

Además de esa necesidad de defensa, el trazado de las calles traducía el concepto que de la vida urbana tenían sus habitantes. La gente acudía a la parte central de la ciudad para sus actividades religiosas, artesanales, comerciales, pero sus viviendas se escondían en el fondo de callejones apartados y silenciosos

Una de las características que diferenciaban a las ciudades musulmanas era el trazado de sus calles. Del centro arrancaban calles angostas, quebradas, tortuosas, de las que partían un gran número de callejones sin salida que se ramificaban como un laberinto. Las calles se consideraban vías privadas, propiedad de los vecinos por las que accedían a sus casas.

En las ciudades islámicas son las casas las que al irse yuxtaponiendo determinan las calles. Así se explica su trazado.

 En el interior de su recinto no existían grandes espacios libres. En la red de calles y callejuelas que se cortaban, el caprichoso ensanchamiento o el cambio de dirección formaban como pequeñas plazoletas de reducida superficie. Junto a las mezquitas solía haber una plaza un poco más amplia

Así nos describe Torres Balbás lo que eran las ciudades musulmanas  y sus barrios, pero esta fisonomía del barrio va a cambiar con el paso del tiempo

Tras la conquista de la ciudad, se inicia una proceso de cristianización que cambiará, en cierta medida, el entramado urbano del barrio:

– Se levantarán 23 iglesias parroquiales, muchas de ellas sobre antiguas mezquitas: San José, San Bartolomé, San Miguel Bajo, El Salvador, San Luis, San Cristóbal, San Juan de los Reyes, San Andrés, etc.

– Muchas calles son producto de reformas que favorecerán nuevas alineaciones y darán mayor amplitud a las mismas con el objeto de controlar mejor las posibles sublevaciones  (el Albaicín era muy dado a ellas)

– Las casas domésticas fueron adaptadas y ampliadas por los nuevos propietarios cristianos.

– Se incrementa el tamaño de «los cármenes» (un carmen era una finca rústica de pequeñas dimensiones que contiene vivienda y jardín – huerto) ya que los habitantes que quedaron tras la expulsión de los moriscos, fueron ocupando las viviendas vacías y las unieron a las propias.

– Se levantan palacios para los nobles o familias pudientes (Casa de Castril, Casa de Ágreda, Palacio del Almirante, Palacio de Carvajal, Casa de los Pisas), se construyen edificios públicos (La Real Chancillería), se realizan reformas urbanas (Plaza Nueva), se urbaniza la Carrera del Darro, se construyen conventos  o monasterios (Santa Isabel la Real, convento de Zafra, de las Tomasas, de la Concepción), se ampliaron y retocaron plazas (San Nicolás, Plaza Larga, San Miguel Bajo), se abre la Calle Pagés para darle una salida a la carrera del Darro hacia la carretera de Murcia, etc.

La conjunción del barrio musulmán y las transformaciones surgidas a partir del siglo XVI, hacen del Albaicín un lugar único y con un patrimonio impresionante.

¿QUÉ PODEMOS VER EN EL ALBAICÍN?

Aquí solamente haré una enumeración de lo más significativo. Los apartados referentes a Aljibes e Iglesias  tienen unas entradas específicas en el bloc. En lo referente a Monasterios y conventos, así como a Palacios, Casas Nobles y casas moriscas, se hace referencia a muchos de ellos en las rutas programadas bajo el apartado: «Plazas del Albaicín»

ALJIBES:

Aljibe de San Ildefonso: Calle Sacristía de San Ildefonso

Aljibe de San Cristóbal o de la Xarea: lateral iglesia de San Cristóbal

Aljibe del Colorado: Calle Larga de San Cristóbal

Aljibe de San Bartolomé: Iglesia de San Bartolomé. Plaza de San Bartolomé

Aljibe de Paso: Calle de San Gregorio Alto

Aljibe de la Cruz de Piedra o de los Conversos: Plaza Cruz de Piedra

Aljibe de San Luis. Calle San Luis

Aljibe de Santa Isabel de los Abades. Calle San Luis

Aljibe de la Vieja: Plaza Aljibe de la Vieja

Aljibe de Polo. Calle Panaderos

Aljibe del Salvador: Plaza del Salvador

Aljibe de Bibalbonud. Placeta del Abad. Lateral del Salvador

Aljibe de Peso de la Harina. Cuesta del Chapiz

Aljibe de las Tomasas. Callejón de las Tomasas

Aljibe de los Negros o de la Cuesta de las Tomasas. Cuesta de las Tomasas

Aljibe de Trillo. Plaza de Trillo

Aljibe de San Nicolás. Plaza de San Nicolás

Aljibe del Rey o Viejo. Plaza Cristo de las Azucenas

Aljibe de San Miguel Bajo. Plaza de San Miguel Bajo. Iglesia

Aljibe de San José. Calle San José. Iglesia de San José

Aljibe del Zenete. Calle Zenete

Otros aljibes en edificios privados: Aljibe de la Alhacaba, Aljibe de la Gitana (Carmen de la Muralla), Aljibe de la Colegiata del Salvador, Aljibe de la Plaza de la Cruz Verde, Aljibe del Gato, Aljibe de la placeta de Oidores.

IGLESIAS:

Iglesia de San Ildefonso. Acera de San Ildefonso

Iglesia de San Cristóbal. Plaza de San Cristóbal

Iglesia de San Bartolomé. Plaza de San Bartolomé.

Iglesia de San Gregorio Alto o Magno. Calle San Gregorio Alto

Iglesia de San Luis (en ruinas). Calle San Luis

Iglesia de San Nicolás. Plaza de San Nicolás

Iglesia de San Miguel Bajo. Plaza de San Miguel Bajo

Iglesia de San José. Calle San José

Iglesia de San Gregorio Bético. Calle San Juan de los Reyes 1

Iglesia San Juan de los Reyes. Calle San Juan de los Reyes

Iglesia de San Pedro y San Pablo. Carrera del Darro

Iglesia de San Gil y Santa Ana. Plaza Nueva

Iglesia de los Hospitalicos. Calle Elvira

Iglesia de Santiago. Calle Marqués de Falces (antiguamente daba a calle Elvira)

Iglesia de San Andrés. Calle Elvira

Capilla de San Juan de Dios. Principio calle Elvira, cerca  Puerta Elvira

Capilla de San Cecilio. Callejón de San Cecilio

Ermita de San Miguel Alto (estaría integrada en el Sacromonte)

CONVENTOS – MONASTERIOS:

Monasterio de Santa Isabel la Real. Calle Santa Isabel la Real

Convento de Santo Tomás de Villanueva (las Tomasas). Callejón de las Tomasas

Monasterio de la Concepción. Plaza de la Concepción

Convento de Santa Catalina de Zafra. Carrera del Darro

Convento de San Bernardo.  Carrera del Darro

Convento de Cristo Rey. Calle San Gregorio Alto

Convento de la Merced. Acera de San Ildefonso

Convento de Santa Inés. Calle Santa Inés

PALACIOS , CASAS NOBLES Y CASAS MORISCAS:

Casa de los Pisas. Calle de los Pisas

Casa del Castril (Museo arqueológico). Carrera del Darro

Palacio del Almirante. Plaza del Almirante. Junto iglesia San José.

Casas del Chapiz (Escuela de Estudios Árabes). Cuesta del Chapiz

Casa de Ágreda. Cuesta de Santa Inés

Casa de Zafra. Calle de Zafra

Casa de Porras. Placeta de Porras

Casa Palacio de Santa Inés. Cuesta de Santa Inés

Palacio de Carvajal. Carrera del Darro

Palacio de los Córdova. Cuesta del Chapiz

Casa de los Migueletes. Condes de Benalúa. Calle Benalúa

Casa de los Mascarones. Calle Pagés

Casa de Yanguas. Cuesta del Chapiz

Casa Horno de Oro. Calle Horno de Oro

Palacio de Dar-Al-Horra. Callejón de las Monjas

 

 

Los aljibes del Albaicín

LOS ALJIBES DEL ALBAICÍN

Cuando oímos hablar de Granada, nos viene a la mente: un monumento, la ALHAMBRA, una barrio; el ALBAICÍN, y un paseo con los amigos degustando un elemento que apasiona a los visitantes, las TAPAS. Hoy nos quedamos con el Albaicín. Barrio declarado Patrimonio de la Humanidad en 1994.

De todo lo que ofrece este barrio singular: calles, plazas, iglesias, monasterios, palacios, aljibes, vistas … nos quedamos con los aljibes.

Decir aljibes, es decir agua, y para comprender la importancia que ésta tiene en el Albaicín y, por extensión, en el mundo islámico, tenemos que hacer una breve referencia a lo que el agua supone en el mundo musulmán:

. El agua significa el origen de la vida y del conocimiento.
“¿Es que no han visto los infieles que los cielos y la tierra estaban unidos y los separamos? ¿Y que hicimos provenir del agua a todo ser viviente?” Corán 21 – 30
“Allah ha creado a todos los animales del agua” Corán 24 – 45

. El agua es un símbolo poderoso de renacer y vivificación
“ Y hacemos descender del cielo un agua pura para vivificar con ella a una tierra muerta y dar de beber a rebaños y seres humanos” Corán XXV 48 – 49

. El agua representa la pureza. Con ella el hombre realiza su higiene corporal y su purificación espiritual antes de los rezos, por eso es uno de los elementos importantes en todas las mezquitas.

. El agua es un don perteneciente a todos por igual y hay que saberla administrar y usar.

Con esta perspectiva religiosa, purificadora y social nos acercamos a los aljibes del Albaicín

Los aljibes son uno de los grandes patrimonios del Albaicín. Estos depósitos de agua tenían una doble función: Abastecer de agua a la población del barrio, que llegó a tener una alta densidad en la época nazarí, y una función religiosa, ya que gran parte de ellos estaban asociados a mezquitas como elemento purificador antes de entrar a rezar.

El agua que llegaba al Albaicín procedía, fundamentalmente, de la Acequia de Aynadamar, construida en el siglo XI por el emir zirí Adb Allah. El origen de la acequia está en Fuente Grande (llamada así por ser el manantial más caudaloso del entorno de Granada), antiguamente llamada Fuente de las Lágrimas (Ayn al-Dama), situada en el término municipal de Alfacar. En la actualidad sólo llega hasta el Fargue, ya que, de ahí en adelante, se ha perdido. Otro punto de abastecimiento procedía del río Darro por la Acequia de San Juan que entraba por detrás del Palacio de los Córdova y discurría por la calle San Juan de los Reyes

El agua de la Acequia de Aynadamar entraba subterráneamente por la Puerta de Fajalauza, situada en la parte alta del Albaicín y, a través de 12 ramales, abastecía de agua a los aljibes, tanto públicos como privados

Hasta nosotros han llegado un total de 28 aljibes, en su mayoría, de época islámica, construidos entre los siglos X y XV y que se han mantenido, en mejor o peor estado, porque estuvieron en uso hasta mitad del siglo XX.. Después se abandonaron y fue a partir de los años 80 del siglo  cuando el Ayuntamiento de Granada realizó una primera actuación de recuperación de los aljibes. El año 2004, con los fondos europeos URBAN (2000 – 2007) de los que se benefició la ciudad de Granada y la colaboración de la Fundación Emasagra, se rehabilitaron nuevamente. De los 28 aljibes, 26 están en el Albaicín, uno en el Realejo (antiguo barrio judío) y otro en la Medina, donde está la catedral. La finalidad de los aljibes era doble: Que el agua estuviera en reposo para que se depositaran las partículas en suspensión y almacenar agua suficiente para el abastecimiento de la población.

En la actualidad se encarga de la gestión de los aljibes la Agencia Albaicín en colaboración con la Fundación Agua de Granada. La Agencia se creó para encargarse de los asuntos y obligaciones adquiridas al ser declarado el barrio Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1994 como una extensión de la Alhambra y Generalife, declarados en 1984. Su sede está en la Casa de Zafra, junto a la Carrera del Darro

No hay un modelo único de aljibe: unos son rectangulares, otros tienen planta basilical, otros son circulares, algunos, en sus cubiertas, nos recuerdan construcciones iraníes, etc. También hay una gran variedad en cuanto a su tamaño: desde el más pequeño, el aljibe de San Luis con 4,5 m3, al más grande, el aljibe del Rey con 300 m3, pasando por otros de tipo mediano, como el aljibe de Trillo con 50 m3

En nuestro recorrido por los aljibes vamos a seguir dos rutas. La asignación a una ruta u otra la he hecho teniendo en cuenta su ubicación.

ALJIBES UBICADOS EN LA ALCAZABA ANTIGUA ( CADIMA O VIEJA Y YIDIDA)

Empezamos nuestra ruta por el Aljibe de San José con una capacidad de 71 m3. Se encuentra situado junta a la Iglesia y el Alminar de San José. Estuvo asociado a la mezquita Al – Morabitin ( la mezquita de los Ermitaños). Siguiendo por la calle de San José salimos a la plaza de San Miguel Bajo, donde, adosado a la iglesia, encontramos el Aljibe de San Miguel de 90 m3 de capacidad y que posee una bonita portada. Este aljibe estaba asociado a una mezquita situada donde se alza la iglesia actual. Continuando nuestra ruta, tomamos la C/ Santa Isabel y por la C/ Pilar Seco, nos dirigimos a la Plaza del Cristo de las Azucenas donde se encuentra el Aljibe del Rey o Viejo, el más grande y el más antiguo del Albaicín, con una capacidad de 300 m3 y con una planta basilical similar a la de los aljibes bizantinos. Este aljibe abastecía desde el siglo XI las huertas y dependencias del Rey Badis de la dinastía Zirí. Su interior se ha acondicionado para poder ser visitado. Dejamos este aljibe y por la calle Aljibe de la Gitana en dirección a la Puerta Nueva o Arco de las Pesas nos encontramos el Carmen de la Gitana donde se encuentre el Aljibe de la Gitana, llamado así por una leyenda en la que la Gitana María se tira a un aljibe al ser liberada de la cárcel y no poder casarse con el hombre al que amaba, porque había muerto. Este aljibe no se puede visitar. A partir de aquí nos dirigimos, por el Callejón de San Cecilio, hasta la Plaza de San Nicolás. Aquí encontramos el Aljibe de San Nicolás con una capacidad de 62 m3. La bóveda que se ve y el pilar de dos caños es de los años 40. La portada con hornacina nos hace pensar que su origen es cristiano y se hizo después de la toma de ciudad de Granada. Sustituyó al aljibe de la mezquita sobre la que se levantó la Iglesia de San Nicolás. El agua que sale por sus caños es potable. Bajando de la plaza de San Nicolás por la Cuesta de las Cabras, llegamos al Carril de las Tomasas donde se encuentra el Aljibe de las Tomasas con una capacidad de 154 m3 y que es un ejemplo de aljibe construido con técnicas helenísticas y bizantinas. Siguiendo nuestra ruta por la Cuesta de las Tomasas y en una placeta con empedrado granadino, encontramos el Aljibe de los Negros o de la Cuesta de las Tomasas con una capacidad de 15 m3. Tiene una planta circular que nos recuerda la forma de las cisternas romanas y que está rematado por una lumbrera cenital que exteriormente se configura como un brocal por donde se extraía el agua. Seguimos por la Cuesta del Aljibe de Trillo, llegamos a la plaza del mismo nombre y, en ella, encontramos uno de los aljibes más conocidos del Albaicín: el Aljibe de Trillo de 50 m3 de capacidad, con una portada rematada por un arco de herradura apuntado y que posee restos de azulejos del siglo XVIII. Este aljibe debe su nombre a que en la calle donde se encuentra vivió el poeta barroco granadino Juan de Trillo y Figueroa

En este espacio de la Alcazaba Vieja existen otros aljibes que, por estar en propiedades privadas, no son visitables, a no ser que sus inquilinos tengan la amabilidad de abrirnos sus puertas. Estos aljibes son: Aljibe de la Plaza de la Cruz Verde, Aljibe del Gato, Aljibe de la Placeta de Oidores

ALJIBES UBICADOS EN EL ARRABAL DEL ALBAICÍN

Bajo este título agrupamos a todos aquellos aljibes que estaban fuera de las murallas de la Alcazaba Qadima o Vieja

Empezamos nuestro itinerario en la parte baja del Albaicín, junto a la Iglesia de San Ildefonso. Subiendo por la C/ Sacristía de San Ildefonso en dirección a la Cuesta de la Alhacaba, encontramos el Aljibe de San Ildefonso con una capacidad de 39 m3. Presenta una profunda portada con una cubierta de cañón y que fue utilizada como almacén hasta que se restauró en 1985. Salimos a la Cuesta de la Alhacaba y en el nº 100 de la misma hay un aljibe, el Aljibe de la Alhacaba, que no es visitable. Siguiendo la calle y antes de llegar a la Plaza Larga, uno de los centros del Albaicín, tomamos a mano izquierda hacia la C/ Larga de San Cristóbal. En esta calle, en su número 20, encontramos el Aljibe Colorado de 35 m3 de capacidad. Hay dos versiones que explican el nombre del aljibe: una hace referencia al arco de herradura rojo raspado de la portada primitiva, y la otra, al color de su agua, pues debía atravesar alguna veta ferruginosa. Siguiendo la calle, llegamos a la Carretera de Murcia. Al otro lado de la carretera se encuentra la Iglesia de San Cristóbal. Bordeando la Iglesia encontramos el Aljibe de San Cristóbal o de la Xarea con una capacidad de 13 m3. Es uno de los aljibes más singulares del Albaicín, ya que se encuentra en un foso de 6,5 metros de profundidad. Estaba asociado a la mezquita del barrio de la Saria o de la Explanada, sobre la que se edificó la iglesia. De vuelta a la calle Larga de San Cristóbal, nos dirigimos hacia la Plaza de San Bartolomé por el Callejón Mataderillo. En esta bonita plaza encontramos el Aljibe de San Bartolomé de 30 m3 de capacidad y que está adosado a la iglesia de San Bartolomé, que se construyó sobre el solar de la mezquita Al – Burriana. El aljibe se encuentra debajo del baptisterio de la iglesia. De aquí nos dirigimos por la calle Carniceros a la Plaza de Carniceros para, cruzando la c/ Pagés, subir por la calle de San Gregorio Alto. En esta calle se encuentra el Aljibe de Paso, llamado así porque era un aljibe de sedimentación de limos. Era el único que no tenía regulado las horas de llenado. Tiene una capacidad de 12 m3. Está situado en el ramal principal de la acequia de Aynadamar. Siguiendo la calle, llegamos a la Plaza de la Cruz de Piedra, cerca de la Puerta de Fajalauza, por donde entraba la acequia al Albaicín. En esta plaza encontramos el Aljibe de los Conversos ( porque, según el investigador Seco de Lucena, aquí estuvo la mezquita de los Conversos) o Aljibe de la Cruz de Piedra. Tiene una capacidad de 17 m3. Saliendo de la placeta, entramos en la calle San Luis y pasada la iglesia de San Luis, en ruinas, salvo la torre, se encuentra el Aljibe de San Luis, el aljibe más pequeño del Albaicín, con una capacidad de 4,5 m3. Era un aljibe de decantación de limos, situado en un ramal secundario de la acequia de Aynadamar. En la misma calle, unos metros más abajo, nos encontramos el Aljibe de Santa Isabel de los Abades, que estaba asociado a la iglesia de santa Isabel de los Abades y que fue demolida en el siglo XVII La fachada está parcialmente oculta por la rasante de la calle. Enfrente del aljibe, parte la c/ Aljibe de la Vieja que nos lleva a la recoleta Plaza Aljibe de la Vieja, donde se encuentra el Aljibe de la Vieja con una capacidad de 31 m3. Su nombre proviene de una leyenda: la leyenda de la Vieja. Pudo estar asociado a una Rábita ( fortaleza militar y religiosa musulmana) o a una mezquita. Del aljibe de la Vieja salimos, por calles estrechas (Mentidero, San Buenaventura), hacia la plaza Aliatar, comúnmente llamada plaza de los caracoles. Atravesamos la calle Pagés y vamos hacia la calle Panaderos por la calle aljibe de Polo, donde se encuentra el Aljibe de Polo de 50 m3 de capacidad, que estaba asociado a un pequeño cementerio musulmán y la mezquita de la Buenaventura. Bajando por la c/ Panaderos salimos a la Plaza del Salvador donde se encuentra el Aljibe del Salvador de 19 m3 de capacidad. Dentro de la Colegiata del Salvador, que se encuentra en la misma plaza, hay otro aljibe, en el patio de lo que fue la mezquita mayor del Albaicín. Vale la pena entrar para ver la colegiata. Cerca de la colegiata, en la Placeta del Abad, se encuentra el Aljibe de Bibalbonud de 21 m3 de capacidad, situado cerca de la Puerta de los Estandartes, donde se enarbolaba el primer estandarte cuando se proclamaba un nuevo rey. El agua de su pilarillo es potable. De nuevo volvemos a la plaza del Salvador y tomamos dirección a la Cuesta del Chapiz, donde encontraremos el último aljibe de este recorrido: el Aljibe del Peso de la Harina de 22 m3 de capacidad. El nombre le viene por su proximidad a la Plaza Peso de la Harina donde se pesaba la harina en el siglo XVII. Este aljibe estaba asociado a la mezquita del Jorobado.

Para terminar nuestra visita a los aljibes del Albaicín, hago una referencia breve a tres aljibes que nos quedan, uno en el Albaicín y los otros dos fuera de él:
Aljibe del Zenete de 37 m3 de capacidad, situado en la c/ Zenete, en el antiguo barrio del Zenete, que significa en pendiente, en ladera, y que da hacia la calle Elvira
Aljibe de Rodrigo del Campo en el barrio del Realejo. Podemos acceder desde Plaza Nueva, Plaza de Cuchilleros y Cuesta Rodrigo del Campo
Aljibe de la Mezquita Mayor donde hoy se encuentran la Catedral y la Capilla Real

Las aguas de Aynadamar feroces e impetuosas en las fauces de las cárcavas, saltarinas en las fuentes y risueñas en los pilares, se amansan en la quietud del aljibe albaicinero.

Aljibe de San José o de la Aljama Al-Morabiti

Se construyó en el siglo XI y pertenece a la época Zirí

Aljibes del Albaicín 040
Aljibe de San José o de la Mezquita Al Morabiti. Albaicín. Granada. Foto: Francisco López

Está ubicado entre el alminar zirí de San José y la iglesia parroquial de San José, asociado a la mezquita Al – Morabiti.
Su capacidad es de 71 m3. Su planta es rectangular cubierta con bóvedas de arista y de cañón. Presenta dos lumbreras cenitales para extraer agua directamente desde la mezquita, primero, y desde la iglesia, después. El coro de la iglesia se encuentra sobre el aljibe.

Aljibe de San Miguel Bajo

Se construyó en el siglo XIII en la época de la dinastía Nazarí

Aljibes del Albaicín 019
Aljibe de San Miguel Bajo. Albaicín. Granada. Foto: Francisco López

Está integrado en la Iglesia de San Miguel Bajo (en la actualidad se denomina Nuestra Señora de la Aurora y san Miguel Bajo), perteneciente a una antigua mezquita sobre la que se levanta la iglesia actual.
Tiene una capacidad de 90 m3 y su planta es irregular, con un callejón de forma quebrada de 4,84 metros de largo, que va de la boca a la sala central con forma rectangular de 5,53 metros de largo y 3 metros de altura. La sala está cubierta con cuatro bóvedas de cañón sostenidas por un pilar central. Al exterior presenta arco de herradura apuntado, de ladrillo, con alfiz, sobre dos fustes y capiteles de origen romano. Toda la portada está rodeada por un arco de ladrillo para evitar el peso del muro sobre la misma.
En una capilla interior, a la izquierda, se ve una de las bóvedas del aljibe

Aljibe del Rey o Viejo

Construido en los siglos X – XI en la época Zirí.

Aljibes del Albaicín 042
Aljibe del Rey o Viejo. Albaicín. Granada. Foto: Francisco López

Se encuentra en la placeta del Cristo de las Azucenas
Es el mayor de los aljibes musulmanes de Granada con una capacidad de 300 m3.
Está alimentado por un ramal de la Acequia de Aynadamar y abastecía las dependencias del Rey Badis de la dinastía Zirí
Es de planta basilical de 10,63 x 11,37 m. y 3,82 metros de alto. Consta de cuatro naves cubiertas con bóvedas de cañón. Tiene tres galerías de arcos de medio punto sobre pilares. Parece que tenía una estructura aterrazada para recoger agua de lluvia. La boca del aljibe, hecha de ladrillo, con arco de medio punto enmarcado en un alfiz, es de construcción moderna.


Se encuentra en el Carmen del Aljibe del rey, sede de la Fundación AguaGranada, que alberga el Centro de Interpretación del Agua.


Está preparado para poder visitarlo por dentro. En las habitaciones de la planta baja hay un pequeño museo de objetos relacionados con el agua, un mapa interactivo de los aljibes del Albaicín y las conducciones de agua y paneles explicativos.

Aljibe de San Nicolás

Fue construido entre los siglos XV – XVIII.

Aljibes del Albaicín 045
Aljibe de San Nicolás. Albaicín. Granada. Foto: Francisco López

La portada con hornacina hace pensar que su origen es cristiano, sustituyendo al aljibe de la mezquita sobre la que se levantó la Iglesia de San Nicolás.
Es de planta casi cuadrada, cubierto con bóveda de cañón. Su capacidad es de 62 m3.
En la primera foto se ve cómo era antes de su restauración, con un pilarillo en la parte delantera. Este pilarillo estuvo un tiempo, después de quitarlo de la parte delantera del aljibe, adosado a un lateral de la iglesia y posteriormente se trasladó a su sitio actual, que no es otro que la parte trasera del aljibe.
El agua del pilarillo es potable. Después de un trago, podemos admirar la Alhambra desde el mirador de San Nicolás.

Aljibe de las Tomasas o Grande

 

Construido en el siglo XII    Pertenece a la época Zirí

Aljibes del Albaicín 043
Aljibe de las Tomasas o Grande. Albaicín. Granada. Foto: Francisco López

Por su capacidad, 154 m3, es uno de los aljibes más grandes de la Granada hispanomusulmana. Por esta misma capacidad , también se le conoce como el aljibe Grande. Su nombre de las Tomasas le viene por estar cerce del convento de Santo Tomás de Villanueva (las Tomasas).

De planta casi cuadrada de 6,60 x 6,50 metros y 4,65 metros de altura. En su interrior tiene cuatro pilares con molduras que sostienen bóvedas de arista, ocultas por la Cuesta de las Cabras.

Su portada es de factura moderna.

Es un ejemplo de las técnicas constructivas de origen helenístico y bizantino.

Aljibe de los Negros o de la Cuesta de las Tomasas

 

Se construye entre los siglos XII – XIV, por tanto, pertenece a las épocas Zirí y Nazarí

Aljibes del Albaicín 044
Aljibe de los Negros o de la Cuesta de las Tomasas. Albaicín. Granada. Foto: Francisco López

Su planta es circular con un diámetro interior de 3,08 metros y una altura de 3,58 metros. Su cubierta es cupulada y posee una lumbrera cenital que exteriormente se configura como un brocal.

Su tipología es diferente al resto de los aljibes, recordando las formas de las cisternas domésticas romanas.

Su capacidad es de 15 m3.

Aljibe de Trillo

Se construyó en el siglo XIV. Pertenece a la época Nazarí

Aljibes del Albaicín 033
Aljibe de Trillo. Albaicín. Granada. Foto: Francisco López

Consta de una nave rectangular de 5,04 x 3,48 metros y 5,25 metros de altura.Está cubierto con dos tramos de bóveda: un tramo con bóveda esquifada y el otro tramo con bóveda de cañón

Su portada, de ladrillo, tiene un arco de herradura apuntado y su boca se cubre con un arco rebajado, ambos enmarcados en un alfiz. Estuvo recubierto de azulejos del siglo XVIII, de los que queda algún resto.

Debe su nombre a que en la calle donde se encuentra vivió el poeta barroco granadino Juan de Trillo Figueroa

Aljibe de San Ildefonso

Se construyó entre los siglos XIV – XV. Pertenece a la época nazarí.

Aljibes del Albaicín 016
Aljibe de San Ildefonso. Albaicín. Granada. Foto: Francisco López

Aunque está en el Albaicín bajo, está alimentado por un ramal de la acequia de Aynadamar.

Consta de una nave rectangular de 4,40 x 2,92 metros y del altura 4,20 metros. Está cubierto con bóveda de cañón.

Presenta una portada profunda cubierta con bóveda de cañón. Esta portada fue aprovechada como almacén hasta que se remodeló en 1985.

Su capacidad es de 39 m3.